Se está celebrando el MOBILE WORLD CONGRESS en Barcelona, donde se presentan numerosos dispositivos e invenciones de todo tipo, anillos inteligentes, gafas con realidad aumentada, móviles con traducción instantánea basada en la I.A., coches voladores y coches eléctricos inteligentes. Todo parece de ciencia ficción, pero... ¿alguien habla de donde van a parar nuestros datos personales cuando usamos dichos dispositivos?
Con una previsión de visitas
de más de 95.000 personas provenientes de todo el planeta, el MOBILE WORLD
CONGRESS, ha iniciado su edición del presente año 2024 con gran éxito.
En la presente edición los más
de 2400 expositores han mostrado sus diseños y productos más innovadores y
rompedores. Hemos visto coches voladores, anillos inteligentes, gafas
holográficas interactivas, dispositivos wearables de todo tipo y condición.
Los fabricantes se afanan en
demostrar las bondades técnicas de sus productos, capacidad de pixeles,
memoria, conectividad, diseño, y capacidades de captar información del usuario,
como temperatura, movimientos, tensión arterial, escenarios donde se están
moviendo los usuarios, y todo ello ya sea mediante anillos, gafas, relojes o el
mismo vehículo donde estamos circulando por la ciudad o la autopista.
En verdad, bajo nuestra
opinión, la verdadera estrella del MWC no es otra que la IA Generativa, que se
ha colado en todos los elementos que interactúan con el ser humano, y que para
las empresas es el futuro campo de batalla comercial.
En efecto, entendemos que
difícilmente se van a tener saltos destacables en materia de hardware, los
procesadores ya son excelentes, las baterías duran y duran, como el famoso
anuncio y las cámaras ya casi tiene calidad profesional...¿Dónde está el siguiente
salto?...evidentemente en el software que solventa problemas diarios de forma
fácil y sencilla mediante una interfaz humana basado en la IA generativa.
Pero, para que esto funcione
con un mínimo de precisión razonable, ¿Qué necesitan los fabricantes?,
evidentemente: datos, millones de datos.
Una IA necesita un
entrenamiento profundo, y para ello mientras más millones de datos tenga, más
fácil será que su nivel de acierto sea elevado y sus “alucinaciones†sean
moderadas o inexistentes.
En este punto, vemos que los
fabricantes tienen una constante vocación de acaparar datos personales, ya sea
con los vehículos eléctricos con autopiloto, ya sea con las herramientas de
apoyo a la salud (p.e. Samsung Galaxy Ring), o con las gafas interconectadas
como algunos modelos de OPPO entre otras marcas.
Este tipo de dispositivos
usados sin control y sin una normativa clara y contundente como es el RGPD
pueden comportar que los fabricantes y terceros vinculados puedan tener no sólo
nuestros rastros de navegación o posición (cómo ya tiene Google) sino nuestro
estado de salud, conversaciones con nuestros amigos en otro idioma, personas
que hemos visto y situaciones que hemos vivido (mediante las gafas
inteligentes).
Por suerte, en Europa tenemos
una normativa bastante clara sobre este tipo de uso de la información como es
el RGPD, y en un futuro también el proyecto de Reglamento de IA al parecer
aclarará bastante qué se puede hacer y qué no en este campo nuevo de
la IA.
En resumen, estaremos a la
expectativa de dicha tecnología y os iremos informando de su evolución.
ATGroup